Consejos para comprar tu bicicleta eléctrica urbana en 2022

Claves para elegir la mejor bicicleta eléctrica urbana para moverte por la ciudad

Cuando pensamos en comprar una bicicleta eléctrica urbana en 2022 tenemos que tener en cuenta algunos factores clave para no equivocarnos, por eso en Biciclasica hemos decidido crear esta pequeña guía para ayudarte a acertar con la bicicleta eléctrica urbana perfecta para ti.

Si sigues leyendo podrás hacerte una idea muy clara de los tres grandes tipos de bicicleta eléctrica urbana que existen actualmente en el mercado y de cuál es el mejor para ti.

En Biciclasica llevamos más de diez años vendiendo bicicletas online, componentes y accesorios para bicicletas de paseo y somos la tienda número uno en bicicletas clásicas de Europa en Internet.

Por eso, hemos querido analizar concienzudamente las principales bicicletas de paseo eléctricas del mercado para asegurarnos de asesorarte cómo necesitas. Estamos seguros de que podemos ayudarte a elegir bien la bici eléctrica urbana que mejor se adapte a ti.

De nuestro análisis hemos extraído tres grandes grupos de bicicletas eléctricas urbanas que te ayudarán a entender perfectamente la oferta actual de ebikes para ciudad. 

Bicicletas eléctricas sobredimensionadas

El primer grupo son las que hemos decidido llamar “bicis eléctricas sobredimensionadas”. Son bicicletas de grandes fabricantes mundiales, creadas por marcas muy reconocidas y que cuentan con todas las garantías, pero que, sin embargo, resultan demasiado caras, demasiado pesadas y demasiado equipadas para el uso de un ciclista urbano.

Más adelante te lo explicaremos con más detalle, pero el problema de las bicicletas eléctricas urbanas de marcas como Specialized, Riese & Muller o Scott es que pesan más de 30 kilos, superan los 4.500€ de precio y están diseñadas con unos componentes que son muy buenos, pero que no se adaptan a la realidad de los usuarios de bicis urbanas (y que, además, encarecen muchísimo el coste y el mantenimiento).

Bicicletas eléctricas Made in China

El segundo grupo -que hemos llamado bicicletas eléctricas made in China– está formado por nuevas marcas y franquicias de automóviles o deportivas. Son bicis urbanas que intentan adaptarse más a la realidad: con un rango de precio mucho menor (desde menos de 1.000 € hasta unos  2.000 €), pero que tienen un diseño bastante pobre, unos componentes poco adecuados y una fiabilidad como mínimo cuestionable. Más adelante las analizaremos con más detalle y con algunos ejemplos concretos.

Bicicletas eléctricas específicas para uso urbano

En el tercer grupo aparecen las bicicletas eléctricas urbanas que verdaderamente tienen sentido. Con un peso y un precio adecuado, están fabricadas por marcas consagradas, con carácter urbano y con unos componentes pensados para la realidad y el día a día de un ciclista de ciudad.

Son bicicletas pensadas ni más ni menos para que lo que necesitas, sin sobredimensiones en sus componentes, para favorecer un rango de precio normal y un mantenimiento mínimo, pero también una gran experiencia de uso gracias a un peso y diseño adecuados. 

En esta categoría tenemos grandes exponentes como la Capri Berlín eléctrica. Una bicicleta eléctrica urbana por debajo de los 1.700 €, con la garantía de un fabricante que lleva más de una década en el mercado y con un diseño muy inteligente pensado para moverse por ciudad y para el día a día de los ciclistas urbanos.

Volviendo a las tres categorías de bicis eléctricas urbanas, entramos en mayor detalle una por una, con algunos ejemplos de modelos para ilustrar cada grupo de bicis y ponértelo más fácil.

Las bicicletas eléctricas “urbanas” sobredimensionadas

Lo primero que queremos recomendarte es que huyas de los modelos de bicicletas eléctricas que cuentan con un claro sobre-dimensionamiento, a no ser que tengas unas necesidades muy específicas.

Hemos encontrado un montón de bicicletas excepcionales, con un rendimiento increíble y unas prestaciones alucinantes, pero que, en realidad, están más pensadas para ir a hacer una ruta cicloturista de cien kilómetros que para tu día a día en la ciudad.

Es algo muy común entre las principales marcas de bicicletas del mundo y lo hemos visto en modelos como la Specialize Turbo Tero, la Riese & Muller Roaster Touring o la Scott Axis eRIDE Evo.

Este tipo de bicicletas son todas de una indudable calidad, pero en nuestra opinión no están bien pensadas para el uso urbano.

Resultan pesadas (suelen rondar los 30 kilos de peso), caras (no las encontrarás por menos de 3.000 € o 4.000 €) y generalmente no tienen la opción de extraer la batería, porque viene integrada en el cuadro.

Tanto sus motores (¡de más de 600W!) como sus baterías (pensadas para durar más de 150 kilómetros), están diseñados para usos extremos, que poco tienen que ver con la realidad del ciclista urbano.

Demasiado potentes, demasiado pesadas y demasiado complicadas, cuentan con frenos de disco y componentes que encaren la bicicleta de manera clara y que están más pensados para cicloturismo que para la ciudad. Dígamos que resulta algo así como comprarse un Ferrari para andar por la ciudad.

Las bicicletas eléctricas urbanas de nuevos fabricantes

Este tipo de bicicletas tiene precios muy ajustados, pero la falta de experiencia previa o la poca exigencia de las mismas en cuanto al diseño las penaliza y juega muy en su contra. Además, comenten el error de intentar imitar la durabilidad de la batería de las bicicletas de la categoría anterior, un aporte de kilómetros extra completamente innecesario que se traduce en baterías enormes, muy pesadas y estéticamente muy poco atractivas.

Suelen ser baterías que se incorporan en el portabultos trasero de manera un tanto tosca y que llaman la atención, para mal, por su tamaño.

Además, el cableado no suele estar muy cuidado y tanto los componentes como los ensamblajes suelen ser “made in China”. En este grupo aparecen los modelos de marcas como Lithium o de franquicias como Norauto.

Las bicicletas eléctricas urbanas que realmente necesitas

En este último grupo encontramos Bicicletas eléctricas muy funcionales y con un diseño cuidado, pensadas para el ciclista urbano y que no priorizan ni una potencia extrema (al fin y al cabo no es una bicicleta ideada para subir un puerto de montaña), ni una autonomía de más de 80 kilómetros.

Teniendo en cuenta que la distancia media de los trayectos en coche en ciudad es de menos de 5 kilómetros, una autonomía en la batería de tu bicicleta eléctrica urbana de 30 o 40 kilómetros ya resultará más que suficiente.

Dale un vistazo a nuestro catálogo y consúltanos si no te decides por un modelo en concreto.